martes, 18 de noviembre de 2008

La Asamblea de IU


Este último fin de semana se ha celebrado la Asamblea Federal de IU y hubo una imagen que me llamó poderosamente la atención, porque estaba terriblemente cargada de nostalgia. Esa imagen se produjo al finalizar el encuentro y en ella aparecía el recién elegido como coordinador de la comisión coordinadora (muestra de los problemas de la formación), Cayo Lara haciendo sonar La Internacional a través de una caja de música que supuestamente había pertenecido a La Pasionaria.

En las imágenes mostradas por televisión apenas se escuchaba la música, los rostros de los asistentes no eran precisamente de felicidad, sino de angustia y el fondo negro del escenario era sombrío y lúgubre. Compárese este final con los de los últimos congresos de los dos grandes partidos, o incluso con los actos de un partido de reciente creación como UPyD, y comprobarán la falta de adaptación de IU a los actuales tiempos políticos, teniendo sobre todo en cuenta la importancia de la imagen en nuestra sociedad actual.

Esta escena es un síntoma de la enfermedad que padece IU y que se traduce en una falta de sintonía total con la sociedad. Creo que hay espacio político a la izquierda del PSOE y que seguirá existiendo en España durante algún tiempo, pero el camino emprendido por IU está abocado a convertirla en una fuerza extraparlamentaria y con escasa o nula capacidad de influencia. La sociedad española, que ya cuenta con la suficiente madurez democrática, percibe cuales son los problemas en los que incurre IU: falta de liderazgo y de un discurso político unitario, presencia en su interior de sectores muy radicalizados, como por ejemplo Sánchez Gordillo, un parlamentario que se encadena al Parlamento, ausencia de actualización de sus fundamentos ideológicos dominados por el Partido Comunista y anclados en la IIIª Internacional, y sobre todo, incapacidad para lanzar propuestas políticas eficientes y realistas.

No obstante, y a pesar de todo se deben agradecer al PCE los servicios prestados en la historia de España, a favor de la democracia y la libertad, destacando la lucha antifranquista y la etapa de la transición. Sin embargo, y llegados a este punto de la historia, propongo una reflexión a las personas que están en ese espacio ideológico. O bien constituyen un partido único con programa político definido y con una estructura que permita a la sociedad visualizar e identificarse con un líder o “lideresa”, abandonando el modelo de coalición. Lo que dejaría fuera elementos radicalizados como los referidos. O bien, se opta por un modelo que puede ser traumático para muchos, pero que creo sería bueno para España, y es el de buscar la unidad de la izquierda en torno al PSOE. Este proceso no sería fácil de gestionar, y plantearía problemas internos dentro del propio Partido Socialista, pero creo que hay que atreverse a ponerlo en marcha. Hay que cerrar ciclos históricos, y este dura ya más de 80 años, cuando el PCE, fiel a la política que se dictaba Moscú, nace de una escisión del PSOE en la década de los 20 del siglo pasado.
La historia ha demostrado el fracaso del modelo de economía centralizada comunista, por tanto es el momento de construir políticas progresistas desde el siglo XXI y para el siglo XXI. Para ello, los que quieran zafarse del pasado deberán caer por su propio peso.

2 comentarios:

Anónimo dijo...

Muy buena reflexión, Mora. Hoy por hoy veo más probable y factible la primera de las soluciones que comentas, la creación de un partido unitario y pasar de las coaliciones. El acercaiento al PSOE podría darse, de hecho, creo que se dará, pero como viene haciéndose desde hace algún tiempo, de manera personal e individual (cambiando su afiliación al PSOE), o con pactos concretos de gobierno. Pero la "unificación" la veo complicada Como tú dices, creo que hay un espacio a la izquierda del PSOE, y a la ciudadanía le convendría más que este sector ideológico aportara a la política, en lugar de dedicarse a las batallas internas.

Un saludo.

Javi
www.juventudessocialistas2h.blogspot.com

Pedro Ordóñez dijo...

Como siempre Mora, observador y atento a aquello que a otros nos pasa desapercibido.
Me encuentro algo alejado de cualquier acumulación ideológica 'en torno' al PSOE. Creo que IU puede asumir la suficiente personalidad, con tiempo y paciencia. Ya sabes que nunca me ha gustado el bipartidismo reinante por lo que estoy a favor de propuestas allende rojo y azul.
un abrazo,
P.