jueves, 3 de febrero de 2011

León el Africano


Acabo de terminar la novela de Amin Maalouf titulada León el Africano y coincide con las revueltas populares de Túnez y singularmente de Egipto. Ambos países constituyen parte de los escenarios de esta novela, que narra la vida de un mercader, viajero, diplomático, intelectual árabe, nacido en Granada antes de la toma por los reyes católicos, criado en Fez y que termina al servicio del Papa de Roma y convertido al catolicismo.

Sin duda el personaje es un ejemplo de hombre con capacidad de adaptación al medio y al entorno donde desarrolla su vida, alejado de integrismos, y en su forma, conciliador. Puede representar la unión de ambas riberas del mediterráneo, en un momento de la historia como este, en el que nunca han estado tan alejadas.

Su vida transcurre en una etapa de convulsiones históricas, en el que dos imperios, el español y el turco buscaban consolidar su hegemonía en el mediterráneo, todo ello en medio de una transformación religiosa, fruto de las tesis de Lutero. Sin embargo, esta novela sugiere que las diferencias entre la ribera sur y la ribera norte del mediterráneo no eran tan grandes como ahora.

¿Qué supondrán los cambios en Túnez o Egipto?, supondrán una profundización de esos países en la democracia, tal y como la entendemos en Europa, o más bien permitirán el ascenso de los islamistas. Esta es la incognita que pretende despejar medio mundo. Aunque quizás para el acercamiento de ambas riberas de este mar interior sea mucho más beneficioso lo que podamos aportar desde aquí.

Quedan pendientes proyectos como la Unión Mediterránea, impulsada a partir de la declaración de Barcelona. Queda pendiente establecer un verdadero intercambio entre los países de ambas riberas, que permita el desarrollo del norte de áfrica y su avance en democracia. Queda pendiente establecer mecanismos de cooperación internacional. Y sobre todo queda pendiente decidir sobre el ingreso de Turquía en la Unión Europa.

Mi opinión personal es que, de entrada, no se puede cerrar las puertas a su ingreso, como pretende Francia. Por tanto, siempre que se cumplan los criterios de convergencia en materia democrática, social y económica, es mejor que Turquía esté dentro de la UE que fuera.

Espero que la demostración de fuerza y valentía de los ciudadanos de estos países contribuya a mejorar su vida y al entendimiento entre los pueblos mediterráneos.

4 comentarios:

Anónimo dijo...

Puede que la novela sea preciosa, como siempre que se trata una ficción es mejor que la realidad. Pero no tienes ni idea de lo que ocurre en este mundo. Y como buen socialista demuestras que tienes que decir lo que los demás quieren oir. Pero la realidad es cruel y Turquía tiene un régimen que no es el que pretende la Unión Europea y si hicierais los deberes y profundizarais en las situaciones te darias cuenta del difícil camino que tiene por delante este pais, y el riesgo inminente que se avecina no solo a Europa, sino al mundo entero.
Lo que está ocurriendo es muy grave y todos los gobiernos del mundo estan espectantes, algún motivo habrá.
La unión mediterranea fue una mas de las multiples tonterias de un señor que tenía que estar en su casa hace mucho tiempo. No se integra en un sistema las personas que no se quieren integrar, y lo que es mas grave un régimen que tiene detrás un ejercito, la diplomacia internacional y un régimen dictatorial y corrupto para que no estalle. Si Francia no los quiere será por algo, o es que los franceses son los malos y vosotros los listos. O mejor será que ellos llevan años sabiendo del asunto.....
Como siempre Jesus, al intentar meter tus ideas en todo lo que te rodea patinas. Me hubiera quedado solo con el comentario del libro.
Cuando se habla de algo grave hay que investigar, si es posible un poquito

Jesús Mora dijo...

Gracias Anónimo por participar activamente en el blog, aunque no compartas mi punto de vista en muchos temas. No obstante, me gustaría que pudieras identificarte. Si no tienes cuenta google puedes dejar tu nombre al finalizar el comentario, así la próxima vez que nos veamos podremos charlar sobre Turquía o el sistema de primarias.

Un abrazo. Jesús Mora

Anónimo dijo...

Como siempre Jesús animas a la lectura y nos haces el gran favor a los demás de compartir buenas y excelentes reflexiones.
No comparto la "no declaración" del anónimo 1 en cuanto a que patinas con tus ideas. No sólo te explicas muy bien, sino que le fastidiaria mucho mas si lo hicieras mejor. No estas haciendo un doctorado en el tema y haces un pequeño comentario (magnifico, por cierto), sobre un tema que aunque es complejo, no es tan negativo como algunos quieren ver. Con la esperanza de las personas es muy fácil jugar, pero creo que ningún régimen que se basa en el ejercito, la diplomacia internacional (?) y sobre todo un régimen dictatorial es sano, y que si el pueblo pide un cambio será por algo. Cuando la situación se complique, cosa que no creo que pasará, nos debemos preocupar, por ahora estamos viendo como termina un sistema basado en la corrupción.
Gracias Jesús por compartir conmigo un poco de ese libro.
Por cierto aunque yo tambien firme como anonimo podemos hablar de cualquier tema, que no dudo que será un momento gratificante.
Un saludo.

Anónimo dijo...

Creo que la novela puede ser interesante,pero pienso que cada pueblo debe vivir según sus crencias, costumbres y sus tradiciones.
Un mundo globlalizado no es bueno.
Solo el respeto y la educación pueden ayudarnos.La lucha contra el enriquecimiento de las clases dirigentes y la corrupción delos políticos.